El transporte moderno ha dependido de los combustibles fósiles, lo que ha contribuido significativamente a la crisis climática. Aunque encontramos más factores que provocan la emergencia climática en la que nos encontramos, los combustibles fósiles (carbón, petróleo y gas) son los que más contribuyen al cambio climático mundial, ya que representan más del 75% de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero y casi el 90% de todas las emisiones de dióxido de carbono.

En ciudades densamente pobladas, los coches y autobuses que funcionan con combustibles fósiles son una fuente importante de contaminación del aire. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), casi toda la población mundial (99%) respira un aire que supera los límites de calidad recomendados y pone en peligro su salud [1].

En la búsqueda de un modelo de movilidad más sostenible, la electrificación del transporte se sitúa como una de las soluciones más prometedoras. Sin embargo, la adopción masiva de vehículos eléctricos no está exenta de desafíos. Uno de los aspectos clave para garantizar su éxito es la infraestructura de carga de vehículos eléctricos, la cual debe expandirse para satisfacer la creciente demanda.

Cargadores de coches eléctricos: pieza clave para la movilidad sostenible
La disponibilidad de cargadores de coches eléctricos es uno de los pilares fundamentales para la adopción a gran escala de los VE. Para que los vehículos eléctricos puedan reemplazar completamente a los vehículos de combustión interna, es crucial una infraestructura de carga bien desarrollada y accesible. En los últimos años, se ha visto un crecimiento importante en la cantidad de estaciones de carga públicas en ciudades y en las principales carreteras.

Además, las compañías energéticas y tecnológicas están avanzando en el desarrollo de cargadores inteligentes que se integran con las redes eléctricas y permiten una carga más eficiente, ayudando a evitar picos de demanda y a optimizar el uso de la energía renovable.

Uno de los cargadores que reúne todas esas características es la eHome 5 de Circutor. Un cargador eléctrico que no solo ofrece una experiencia de carga optimizada para el usuario, sino que también está diseñado para simplificar y agilizar el proceso de instalación. 

Un cargador versátil y eficiente
La eHome 5 es una herramienta inteligente que ofrece flexibilidad y eficiencia en la gestión de la carga, con tres modos de recarga, cada uno pensado para distintas necesidades:

• Just Green: este modo funciona solo con energía solar, ofreciendo una carga 100% verde. Es la opción ideal para aquellos comprometidos con la sostenibilidad y que desean maximizar el uso de su instalación solar.

• Smart Mix: combina de manera eficiente la energía solar y la de la red eléctrica, priorizando siempre los recursos renovables cuando están disponibles.

• Boost: enfocado en la velocidad, este modo utiliza toda la energía disponible para cargar el vehículo lo más rápido posible, ideal para situaciones en las que el tiempo es crucial.

Esta capacidad de adaptación no solo facilita la vida del usuario, sino que también optimiza el consumo energético del hogar, reduciendo costes y evitando sorpresas en la factura eléctrica. La eHome 5 está disponible en versiones monofásica (7,4 kW) y trifásica (22 kW).

Los retos que nos esperan
La adopción generalizada de vehículos eléctricos y cargadores aún enfrenta desafíos, pero para lograr un futuro más eficiente, la movilidad sostenible y la electrificación del transporte son dos elementos esenciales. A medida que las tecnologías mejoren, los costes de los vehículos eléctricos disminuyan y se amplíe aún más la infraestructura de recarga, más personas adoptaran el vehículo eléctrico, contribuyendo a la reducción de emisiones y al desarrollo de ciudades más saludables. 

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