La reciente IV Cumbre de Autoconsumo de UNEF reunió en Madrid a un importante número de autoridades y expertos para discutir el futuro del sector. Tras un 2022 de récord, los distintos ponentes coincidieron en que 2023 demostró que el autoconsumo se ha consolidado como un negocio estable, rentable y de futuro. A pesar de no superar los 2 GW anuales instalados, el pasado año puso de manifiesto que empresas, industrias, comercios y usuarios residenciales ven ya el autoconsumo como una manera eficaz de reducir sus facturas eléctricas.
Pero el encuentro celebrado en la capital dejó también una pregunta evidente en el aire: ¿qué hacemos ahora, una vez que ya se han agotado las subvenciones directas al autoconsumo que provenían de los fondos europeos Next Generation? Como es lógico, no hay una única respuesta. Las opciones son múltiples pero los expertos convocados por UNEF, desde responsables políticos a consultores, desarrolladores de proyectos o fabricantes de equipos fotovoltaicos, hablaron de la necesidad de aplicar “soluciones imaginativas” y de hacer crecer al sector “con inteligencia”. ¿Y en qué se concreta todo ello? Básicamente en aplicar deducciones fiscales al autoconsumo. Las más demandas por el sector se basan en aplicar un IVA del 0% a paneles, inversores y baterías dedicados a autoconsumo, así como plantear desgravaciones fiscales asociadas al IRPF; además, resulta fundamental que se extiendan las deducciones o exenciones del IBI en los municipios para nuevos proyectos de autoconsumo; por último, desde el sector se reclama también la necesidad de homogeneizar el criterio de 2.000 metros entre generación y consumo en todas las instalaciones de autoconsumo, ampliar el mecanismo de compensación simplificada a 450 kW de forma que puedan acogerse todas las industrias medianas o desarrollar coeficientes dinámicos para aprovechar al máximo la generación de autoconsumos colectivos.
“El autoconsumo ha vivido un crecimiento histórico en estos últimos años. Desde que, en 2021, celebraseis el I Foro, hemos visto cómo ha acelerado su implantación, hasta alcanzar los casi 7 GW, como reflejan los datos del propio sector. De hecho, solo en 2023 se ha instalado en España el autoconsumo equivalente al 35% de toda la potencia de fotovoltaica que había en 2018. Un desarrollo que se refleja claramente en la participación de eventos como esta cumbre, que se ha más que triplicado, y la actividad y liderazgo de empresas de la cadena de valor solar en España”, comentó Sara Aagesen, secretaria de Estado de Energía del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, durante la inauguración del evento.
Para Rafael Benjumea, presidente de UNEF, “este evento está enmarcado en un año transcendental y de transición en el que, con el reloj en plena cuenta atrás para cumplir los ambiciosos y necesarios objetivos de descarbonización de nuestra economía, necesitamos abordar nuevas formas de impulso para que la generación distribuida nos permita alcanzar una meta en la que tanto nos jugamos como país. Los datos del sector fotovoltaico nacional de 2023 así lo reclaman: el año pasado se instalaron 1.706 MW de nueva potencia en instalaciones de autoconsumo, cifra inferior a las del año 2022. Año que tenemos que considerar como un año pico, debido a sus circunstancias excepcionales
Este año, el almacenamiento vinculado al autoconsumo ha tenido un lugar protagonista en esta IV Cumbre debido al papel fundamental que tiene para extender la ventaja competitiva de la fotovoltaica a las horas de menos sol a la vez que aporta una solución ante un nuevo paradigma de precios bajos en el mercado mayorista.
“No toda la responsabilidad sobre el futuro del sector recae en la administración, y es que debemos analizarnos a nosotros mismos para poder seguir mejorando y reinventándonos cada día, evolucionando como ya están haciendo muchas de nuestras empresas hacia nuevos modelos de negocio. Ya no es suficiente ofrecer a la ciudadanía una instalación de autoconsumo, sino que debemos plantear un servicio integral para hacerlo más atractivo. Ofreciendo almacenamiento, por supuesto, pero también conectando las instalaciones con cargadores de vehículos eléctricos o aerotermia”, recordó Benjumea.
En definitiva, todos los agentes implicados en el autoconsumo han de unir fuerzas para diseñar una nueva hoja de ruta basada en el aprendizaje de los últimos años que permita encontrar fórmulas efectivas a nivel regulatorio y financiero que hagan que el autoconsumo siga siendo atractivo para empresas y ciudadanía.
¡Ayúdanos a compartir!
Y ADEMÁS
EMPRESAS PREMIUM
Política de privacidad | Cookies | Aviso legal | Información adicional| miembros de CEDRO