Revista Energética. Noviembre 2024
Y SISTEMAS DE CONTROL Transición energética: ¿son importantes los grupos electrógenos? Adiferenciade las renovables, los grupos electrógenos nodependende condiciones naturales muchas veces impredecibles, por lo que resuelven de manera sólida la inestabilidad de estas. ANTÍA MÍGUEZ COORDINADORA DE SOSTENIBILIDAD DE GENESAL ENERGY L a energía es uno de los ejes principales sobre los que giran todas las actividades económicas y sociales, pero mantener a largo plazo el actual sistema energético es imposible y el paso a otro modelo basado en fuentes renovables en lugar de en combusti- bles fósiles, y donde la clave sea la generación distribuida, la eficiencia energética y la digitali- zación, es clave en un proceso imparable. En este nuevo escenario la transición energé- tica se convierte, más que en una solución, en una necesidad —medioambiental, social y eco- nómica—de avanzar hacia sistemas de produc- ción, distribución y consumo bajos en carbono. La transición busca que el futuro de la ener- gía esté formado por una red compuesta de diversas fuentes energéticas limpias y sos- tenibles que trabajen conjuntamente entre ellas para favorecer la eficiencia y la fiabilidad de los sistemas. Ahora bien, un mix energéti- co con estas características aún no es viable. No sólo somos todavía incapaces de cubrir el 100% de la demanda energética con energías renovables, sino porque existen limitaciones considerables para almacenar grandes canti- dades de energía. Y hay más factores a tener en cuenta: no en todos los sitios hay disponi- bilidad y acceso a las energías renovables e, incluso aunque lo hubiera, está el problema de la intermitencia de éstas. Los ciclos de máxima producción de estas energías no siempre coinciden con los de máxima demanda, y, a diferencia de lo que ocurre con la generación de fuente fósil, esta producción no es ajustable, salvo que intro- duzcamos tecnologías de almacenamiento. ¿Energías fósiles y renovables a la vez? Esto nos lleva a que, a corto y medio plazo, la tendencia consista en combinar las energías fósiles y las renovables, buscando eliminar los aspectos negativos de utilizar cada una de ellas de modo individual al tiempo que se va reduciendo de forma progresiva la dependen- cia de los recursos fósiles. Este escenario favo- rece la utilización de los grupos electrógenos. Su papel importa. Ventajas: 1. En primer lugar, su instalación permite el acceso a una energía de calidad en luga- res en los que no se dispone de acceso a energías renovables y no llega la red con- vencional, como zonas rurales o islas. 2. Además, incluso en aquellas ocasiones en las que se integran en un mix energé- tico formado por energías limpias, sus características les permiten aumentar la fiabilidad y la eficiencia de los sistemas, lo que se traduce a su vez en una dismi- nución de costes de operación. 3. A diferencia de las renovables, los grupos electrógenos no dependen de condicio- nes naturales muchas veces imprede- cibles, por lo que resuelven de manera sólida la inestabilidad de estas. 4. Su capacidad de proporcionar una res- puesta rápida ante las variaciones de carga los convierte en una alternativa de almacenamiento óptima. 5. Gracias a los sistemas integrados de ges- tión inteligente, es posible planificar su funcionamiento en base a condiciones específicas y espacios temporales con- cretos, permitiendo adelantarse a po- tenciales situaciones adversas. Es decir, que en un contexto de transición energética como el que estamos viviendo, los grupos electrógenos juegan un papel fundamental a lo largo de los próximos años, sirviendo de apoyo a la necesaria transfor- mación del sistema eléctrico, al tiempo que aumentan la fiabilidad, la seguridad y la efi- ciencia de las redes. Ahora bien, también presentan una gran desventaja que no puede ser ignorada: el diésel y su rendimiento ambiental. Si bien el sector de los grupos electrógenos no es el más contaminante, las empresas más pun- teras e innovadoras buscan cómo reciclarse y evolucionar hacia un funcionamiento más limpio con menores emisiones. HVO: más allá del diésel En este contexto de ir más allá del diésel, se están explorando diferentes caminos. Una op- ción que se posiciona como gran alternativa es el biocombustibleHVOo diésel renovable. Pro- ducido a partir de diferentes materias primas vegetales y no vegetales, como el aceite de co- cina vegetal usado o los residuos de grasa ani- mal, el HVO supera muchos de los problemas que hasta ahora presentaban los biocombusti- bles más tradicionales como el biodiésel. Para empezar, el HVO puede utilizarse como combustible directo, sin necesidad de mezclarse con diésel fósil ni de hacer mo- dificaciones sobre los motores. Además, su almacenamiento no requiere una planifica- ción concreta ya que, al no ser propenso a la degradación, se puede almacenar en un tanque sencillo de plástico o metal. Y lo que es más importante: cuando se fabrica a partir de aceites de cocina usados, permite reducir las emisiones de gases de efecto invernade- ro en hasta un 90% respecto al diésel fósil ◉ grupos electrógenos 32 ENERGÉTICA XXI · 241 · NOV 24 C M Y CM MY CY CMY K
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