Rodrigo Ruiz analiza en esta entrevista el papel del almacenamiento como “como parte integral de la generación renovable”. Asegura que tiene que ser “competitivo” y que debe ser capaz de integrarse con el resto de elementos de las instalaciones, entre ellos, el vehículo eléctrico o la aerotermia. Al mismo tiempo, reclama una regulación que fomente este tipo de instalaciones con acumulación. El responsable de SolaX Power nos adelanta también los nuevos equipos en los que está trabajando la compañía de cara a 2025: una solución a nivel de utility o gran escala con productos de 800 voltios y, además, una bomba de calor de última generación a precio competitivo para el sector residencial.
¿Cómo definiría el momento actual que vive el mercado fotovoltaico en España, especialmente en ámbito del autoconsumo (residencial, comercial e industrial) y las soluciones de almacenamiento para este sector?
El mercado de autoconsumo nos está haciendo reflexionar, primero para entender cuáles son las necesidades reales de implementación según el contexto de precio de electricidad, de economía de los usuarios y productos disponibles en el mercado. En este año, hemos vivido un enfriamiento de la demanda tras un tsunami de instalaciones en 2022 y 2023, lo que ha quedado es un mercado afectado por ese aluvión de instalaciones. En concreto, la demanda se ha desplazado de un perfil de instalaciones en el uso doméstico hacia una mayor implementación en aplicaciones comerciales e industriales. Relativo a las baterías, tenemos que tener en cuenta que la regulación actual no empuja o fomenta la instalación de las mismas, nada más que como un opcional, pero la necesidad del entorno energético español demuestra una carencia de flexibilidad en el sistema cuando la generación proviene de renovables.
Vamos hacia una gestión energética integral en hogares y empresas, que une generación distribuida, almacenamiento, recarga de vehículo eléctrico, aerotermia, etc. ¿Cómo afronta SolaX Power este conjunto de soluciones interconectadas que demandan ya los clientes?
La electrificación de la demanda es un proceso natural de eficiencia energética, tanto para el uso en el hogar como para los comercios. Esta electrificación despierta el interés en generar tu propia energía o acceder a un kilovatio hora muy competitivo. SolaX aporta todo tipo de soluciones en el beneficio del usuario final: primero, aportando equipos eficientes con funcionalidades simplificadas e integrables en soluciones, como son el vehículo eléctrico, la aerotermia, etc.; y segundo, aúna todo en una plataforma para que el usuario gestione esa energía o el uso que quiere darle y optimice su ahorro y su bienestar, porque una parte muy importante de la electrificación es el confort.
¿Qué tendencias e innovaciones tecnológicas cree que seguirán en 2025 los fabricantes de inversores?
La innovación es el día a día del sector. En este caso, en 2025 esperamos que el almacenamiento en aplicaciones comerciales e industriales se implemente como medida para mejorar las inversiones fotovoltaicas. Esto también irá acompañado de una importante inversión en infraestructura de carga de vehículo eléctrico. Los fabricantes estamos complementando en las funcionalidades de nuestro inversor una forma funcional sencilla y efectiva para generar beneficio para las empresas con este tipo de tecnologías y no debemos olvidar que el almacenamiento, como parte integral de la generación renovable, debe ser competitivo y, por tanto, deberemos trabajar en mejorar esos costes y el rendimiento de los equipos.
¿Podría adelantarnos algunas de las nuevas soluciones que presentará Solax Power a lo largo del próximo año?
SolaX ha ido creciendo su gama de productos acorde a la demanda y acorde a su propia experiencia para atraer al mercado innovación siempre basada en fiabilidad y robustez. En este año, el primer paso que vamos a dar es añadir productos a la gama a nivel de utility o gran escala con productos de 800 voltios y, además, en el segmento más orientado al consumidor final, traeremos una bomba de calor de última generación a precio competitivo para integrar dentro de las soluciones SolaX.
En cuanto al almacenamiento energético, ¿qué cambios regulatorios cree que son imprescindibles para que despegue el sector en nuestro país?
Creo que se debería plantear la implementación de soluciones de redes inteligentes en las que tanto la demanda como la gestión tengan la posibilidad de ser flexibles. Aquellas instalaciones con vertido deberían tenerla flexibilidad de llevar la energía al sistema acorde a la demanda. Esto puede ser por agregación de demanda con sistemas de almacenamiento o puede ser simplemente gestionado los horarios de vertido a red. Las ayudas a las instalaciones de generación o autoconsumo deberían ir orientadas a fomentar aquellas que vayan con sistemas de almacenamiento. Ojo… siendo principalmente ayudas fiscales, sin depender de fondos europeos o fuentes de financiación puntuales.
Al margen de estos cambios regulatorios, ¿qué aplicaciones son las más interesantes ahora mismo para la acumulación, tanto ‘detrás’ como ‘delante’ del contador?
Teniendo en cuenta que se han producido ya precios de electricidad negativos y que esto no va a mejorar, cualquier aplicación con acumulación de la energía renovable es una buena idea. Delante del contador hablamos de apoyos a red directos para que nuestra flexibilidad la haga más competitiva y las inversiones no estén expuestas a regalar energía. Detrás del contador, hablamos de que los prosumidores sean capaces de participar de una forma más útil y conveniente del mix energético. Ejemplos claros serían acumulaciones de cara a potenciar la red de carga de vehículos eléctricos o las comunidades energéticas en entornos distribuidos.
Siempre es complicado hablar de precios de equipos, pero ¿cómo cree que evolucionarán los costes de las baterías para instalaciones fotovoltaicas en los próximos meses? ¿Es todavía el precio una ‘barrera de entrada’ para las baterías?
El precio de las baterías es altamente competitivo en un entorno de precios de electricidad europeos; prueba de ello son países como Alemania, Países Bajos e Italia. Para la llegada a España de la implementación masiva de baterías, una bajada de precio en el almacenamiento sería de gran ayuda, ya que el coste del kilovatio hora es extremadamente bajo y fomentaría una red mucho más eficiente.
SolaX Power nació en 2012 y sus soluciones están ya presentes en más de 80 países ¿Qué supone el mercado español para la compañía? ¿Cuál es su importancia en el contexto internacional de la empresa?
El mercado español debería ser el segundo o tercer mayor mercado para SolaX por sus condiciones óptimas de madurez y tamaño de territorio, pero mientras las baterías no ganen peso en las instalaciones el posicionamiento o diferenciación de la marca es complejo. Nosotros apostamos por innovación y por soluciones diferenciadas, y para eso no vale con simplemente un inversor a secas.
¿Cuáles son los objetivos a corto y largo plazo de SolaX en España? ¿Cómo ve el futuro de la compañía en el contexto de la industria renovable en nuestro país?
La empresa tiene un crecimiento ambicioso basado en la capacidad tanto de generar producto competitivo como aportar calidad al sector. El planteamiento pasa por conseguir ser top 5 en 2025 y top 3 en 2026, lo que conlleva una larga labor de posicionamiento de marca y de aportar el mejor servicio en cada segmento.
¿Qué ventajas aportan las soluciones que ofrece SolaX respecto a las de otros fabricantes que llevan más tiempo en el mercado?
Precisamente nuestro fuerte es esa diferenciación con respecto a fabricantes que llevan mucho tiempo en el sector, pero sin evolucionar sus productos. Tenemos una gama de híbridos más completa que la de cualquier fabricante. Todos y absolutamente todos nuestros híbridos se pueden instalar desconectados de red, es decir, en aislada u off-grid, porque integran una salida de emergencia que permite usarlos como sistema de backup completos. Además, hemos desarrollado un software expresamente para nuestros productos que da una experiencia de usuarios y una gestión de la operación y mantenimiento en productos de todos los niveles, tanto residencial como de mayor escala que lo hace muy competitivo. Como guinda a las ventajas, yo destacaría la facilidad de paralelización de equipos y la flexibilidad a la hora de aportar una solución con nuestros productos a cualquier tipo de aplicación que se pueda necesitar. La competencia no se atreve con soluciones complejas pero nosotros tenemos un lema ‘Con SolaX, sí’.
¿Cuáles son las áreas donde enfoca la compañía sus nuevos desarrollos e inversiones en I+D?
Al ser una empresa enfocada en innovación, nuestro espectro de desarrollo es muy amplio, tanto en nuevas tecnologías de almacenamiento como en distintas plataformas y estándares de desarrollo de microrredes o redes inteligentes, así como en funcionalidades de inteligencia artificial para optimizar el uso de la energía. Por supuesto que no se descuida el desarrollo a nivel de hardware de nuevos componentes y elementos de electrónica de potencia que puedan dar un salto sustancial, tanto en peso como en tamaño de los equipos a implementar.
¿Ofrece SolaX algún tipo de servicio enfocado a los instaladores españoles o formación para los profesionales del sector?
Al ser una empresa joven nos gusta siempre estar activando nuevos beneficios tanto para instaladores como para los clientes finales y en este 2025 pensamos poner en marcha nuestro programa de instaladores con una serie de ventajas que no solo potencien una mayor penetración del producto en el mercado sino también una mayor calidad de las instalaciones de la mano de nuestros socios, teniendo instaladores certificados en la que la certificación no sea un mero papel sino una serie de ventajas directas. Una formación de alto nivel y un acceso a gestión optimizada de las instalaciones con nuestro producto.
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