General Cable sigue adaptando su gama de productos conforme a los avances en el desarrollo de la Regulación Europea de Productos de Construcción (CPR), aprobada el año pasado. El objetivo de esta normativa es facilitar la libre circulación de productos de construcción seguros y armonizados dentro de la Unión Europea. Dada su condición de directiva, es de obligada transposición en las leyes locales de los países miembros. General Cable muestra así su compromiso con la seguridad y ofrece a sus clientes la garantía de unos productos en línea con los requerimientos de la normativa CPR.

Todos los productos de construcción que se utilizan en el mercado europeo deben llevar el sello CE y cumplir unos estándares de calidad homogéneos. La adopción de estos estándares (Euroclass) es responsabilidad de cada estado miembro. La regulación CPR también se aplica a los cables de energía, control y comunicaciones, puesto que son de aplicación en la construcción. Incluye especificaciones técnicas armonizadas y un vocabulario unificado, según los métodos de comprobación y control de calidad Euroclass. Las características que deben reunir estos productos y las condiciones de certificación de su rendimiento están descritas en la CPR.

Seguridad ante el fuego
Una de las principales exigencias de la CPR tiene que ver con la seguridad en caso de incendio. Cada norma Euroclass detalla el comportamiento que debe tener un cable frente al fuego. El procedimiento de comprobación incluye factores funcionales, como el poder de disipación, las emisiones de humos y gases, así como su acidez. Todos estos requerimientos están definidos para aumentar el nivel de seguridad de las personas y los bienes materiales. Su campo de aplicación comprende los edificios y las obras de ingeniería civil, como túneles, puentes o autopistas.

De acuerdo con las especificaciones de la normativa CPR, existen seis clases de rendimiento ignífugo, desde la A (nivel muy alto) hasta la F (nivel muy bajo). También hay criterios adicionales para las clases B a D, como el humo, la acidez y la caída de gotas o partículas. Tal como establece la CPR, General Cable incorpora en sus cables una declaración de prestaciones (DoP, en inglés) que especifica cuál debe ser su uso, la reacción ante el fuego y la información técnica de apoyo. La reglamentación se halla actualmente en fase de transición y será de obligado cumplimiento a partir del 1 de julio de 2017.

Los equipos de I+D de General Cable han estado trabajando para que todos sus cables cumplan los parámetros de sus clases específicas y en breve lanza sus primeras Declaraciones de Prestaciones cubriendo una parte muy importante de su rango de productos. La mejora de la seguridad ha sido desde siempre una de las mayores preocupaciones de la compañía, especialmente en lo relativo al comportamiento de los cables frente al fuego. La reglamentación CPR es un gran logro de la industria en este aspecto y General Cable la ha apoyado sin reservas. De hecho, ha participado junto con otras empresas y asociaciones en el desarrollo de la norma. El primer objetivo es la prevención (evitar el riesgo de incendio) pero si éste se produce también es muy importante limitar sus efectos negativos asociados.