Irizar e-mobility se convierte en la primera fábrica de electromovilidad de energía verde en Europa gracias a la inauguración y puesta en marcha del mayor parque solar fotovoltaico del País Vasco.
La inauguración del parque ha tenido lugar en presencia del Lehendakari Iñigo Urkullu y una delegación del Gobierno Vasco, junto al Ente Vasco de Energía y los socios del parque solar Ekian del que el Grupo Irizar es uno de los mayores inversores con 3 MW adquiridos.
La energía generada es este parque abastecerá las instalaciones de Irizar e-mobility, convirtiendo a ésta en la primera fábrica de producción de autobuses eléctricos cero emisiones de energía totalmente limpia en Europa.
El Grupo Irizar está totalmente comprometido con el medioambiente y, desde que en 1998 obtuviera la ISO 14001, ha venido dando pasos de forma activa en la transformación energética.
La apuesta en electromovilidad iniciada desde 2011 es el máximo exponente del cuidado por el entorno y por el bienestar de los ciudadanos. Fruto de ese compromiso es el Premio Nacional de Medio Ambiente en la categoría de producto-servicio en España, obtenido por Irizar en 2016.
La reducción progresiva de las emisiones de CO2 y de otras sustancias contaminantes, así como la introducción de criterios medioambientales desde el diseño de sus productos, y el fomento del espíritu de respeto hacia el medioambiente de sus personas y colaboradores son sus premisas más importantes.
Ekian es una iniciativa público-privada promovida por el Ente Vasco de la Energía y Krean y cuenta con 22 empresas inversoras. La planta solar fotovoltaica Ekian está ubicada en una finca industrial de 55 hectáreas de extensión denominada “La lágrima” dentro del Polígono Industrial Arasur, en el término municipal de Ribera Baja-Erribera Beitia de Álava.
Está formado por un conjunto de 66.000 paneles solares de última generación de 355 vatios cada uno, lo que en conjunto suma una potencia instalada total de 24 MW que duplica la potencia solar actual de Euskadi. A pleno rendimiento producirá aproximadamente 40.000 MWh anuales, es decir, energía eléctrica equivalente al consumo eléctrico de 15.000 familias en un año y evitará la emisión de cerca de 14.600 toneladas de CO2 si esa energía fuera producida mediante otras fuentes de energía de origen fósil.