Ignacio Valdeolmillos, desarrollo de negocio – VE, Almacenamiento Energético y Renovables en Carlo Gavazzi

Más allá de la instalación y puesta en marcha, la optimización del sistema fotovoltaico es crucial para maximizar el autoconsumo y la rentabilidad de la inversión.

Algunas estrategias necesarias incluyen:

• Análisis detallado del consumo a través de sistemas de monitorización y análisis de datos para comprender los patrones de consumo energético de la propiedad, identificando oportunidades para optimizar el uso de la energía solar. Con el fin de obtener el máximo rendimiento de nuestro sistema de autoconsumo, es realmente necesario saber cómo consumimos la energía, horarios, cargas, potencias, energía y potencia activa y reactiva. Con toda esta información podremos actuar de manera automática e inteligente. Muchas empresas producen energía eléctrica mediante el autoconsumo fotovoltaico a precios muy razonables, pero no saben cómo ni cuándo consumen, porque no tienen sistemas de monitorización. ¿Qué máquinas consumen más? ¿En qué horarios se pueden emplear los excedentes fotovoltaicos para cargar vehículos eléctricos de la flota o de los empleados? ¿Están controlados los gastos de climatización? ¿Cuánto consumen las distintas partes del proceso de producción? Preguntas que precisan respuestas para gestionar de manera eficiente la energía producida por el autoconsumo.
• Gestión inteligente del consumo mediante estrategias de control para ajustar el consumo de energía en función de la producción fotovoltaica, maximizando el autoconsumo y reduciendo la dependencia de la red eléctrica. A partir de la información detallada recogida de la producción fotovoltaica y los patrones de consumo, podemos actuar para aprovechar la energía de manera más eficiente, por ejemplo, cargando los vehículos eléctricos de la empresa en horarios donde disminuye el consumo, o bajando las temperaturas de las cámaras aprovechando momentos de máxima irradiancia (inercia térmica), etc.
• Integración con baterías con sistemas de almacenamiento de energía en baterías para almacenar el excedente de energía fotovoltaica y utilizarlo durante períodos de baja producción o de alta demanda. Aunque las baterías suponen una inversión importante, cada vez resulta más rentable el almacenamiento energético.
• Autoconsumo compartido para explorar modelos de autoconsumo compartido en polígonos industriales, comunidades o edificios multifamiliares para optimizar el uso de la energía solar y reducir costes.
• Compensación de la energía reactiva, a pesar de ser una estrategia poco conocida, los inversores fotovoltaicos pueden compensar el exceso de reactiva, evitando penalizaciones, mantenimiento y averías en los bancos de condensadores. La mayoría de los inversores del mercado realizan este tipo de compensación, incluso durante la noche. La capacidad de un inversor fotovoltaico para compensar la reactiva varía según el modelo y el fabricante. Algunos inversores tienen funciones de compensación de reactiva más avanzadas que otros. Se aconseja consultar con el fabricante del inversor para obtener información específica sobre sus capacidades de compensación de reactiva.

Es importante remarcar que, de la misma manera que estas estrategias están orientadas a la optimización de la producción y el autoconsumo fotovoltaico, nos encontramos con barreras burocráticas que limitan la producción fotovoltaica.

En estos momentos, los sistemas de inyección cero (antivertido) están presentes en un gran número de las instalaciones de autoconsumo mayores de 100 kW. El objetivo principal de estos sistemas es evitar el vertido de excedentes energéticos a la red eléctrica. En el caso de algunas instalaciones de potencia superior a 100 kW, si tienen un sistema de antivertido fotovoltaico, quedan eximidas de permisos de acceso y de conexión a la red. Esto conlleva menos trámites y más agilidad a la hora de ejecutar el proyecto. Sin embargo, supone una infrautilización de las instalaciones fotovoltaicas, que podrían generar mucha más energía renovable si no estuvieran limitadas por estos sistemas antivertido, con todas las consecuencias asociadas como el aumento de las emisiones de CO2, un gran tema pendiente de ser abordado.

El autoconsumo fotovoltaico es una práctica cada vez más común en las empresas y Carlo Gavazzi ofrece una amplia gama de soluciones que incluyen sistemas de monitorización y control universales, y que permiten monitorizar y controlar diversos aspectos del autoconsumo fotovoltaico.

En conclusión, el autoconsumo fotovoltaico se ha convertido en un elemento fundamental en las empresas. Es necesario monitorizar todas las variables relevantes de la instalación y contar con sistemas de control automáticos avanzados para optimizar su rendimiento.