El parque eólico offshore de Saint Brieuc, que estará operado por Iberdrola frente a la costa de la Bretaña francesa, ha entrado en su segunda fase de ejecución, al comenzar los trabajos de envío de los bloques de cimentación sobre los que se colocarán los aerogeneradores desde el puerto de Fene (A Coruña). La operación logística de transporte se ha encomendado a Sarens, uno de los principales especialistas en levantamiento de cargas pesadas y transporte de ingeniería del mundo, que ha puesto a disposición del proyecto su barcaza Caroline.

Para este proyecto, la compañía encargada de la construcción de la infraestructura marina sobre la que se ubicará el parque, la neerlandesa Van Oord, decidió recurrir a Sarens como operador de las maniobras de transporte de cada uno de los jackets o bloques de cimentación, debido a la amplia experiencia de este en proyectos similares, y a la exigencia del trabajo -cada bloque supera las 1.150 toneladas de peso, los 75 metros de altura y los 25 metros de anchura-. 

La barcaza utilizada en esta operación, Caroline, es una de las ocho plataformas flotantes de transporte con las que cuenta Sarens en la actualidad, y destaca por ser la más grande y polifacética de todas. Con unas medidas de 122 x 36 x 7,6 metros, este elemento es capaz de admitir cargas de hasta 25t/m2 con una gran estabilidad, permitiendo su remolque a largas distancias.

El transporte de los jackets no es la única operación logística en la que está involucrada Sarens en lo que al parque eólico de Saint Brieuc se refiere. Desde abril de 2021, la compañía europea trabaja en el puerto de Fene, por encargo de Navantia-Windar, en las labores de construcción de los jackets. En esta operación, aún en marcha, Sarens está utilizando una de las dos unidades de grúa Demag CC9800 existentes en el mundo para la elevación del módulo superior de cada jacket, con un peso de 600 toneladas, y su colocación a más de 70 metros de altura. 

El nuevo parque eólico offshore de Saint Brieuc, cuya segunda fase de instalación finalizará este mismo verano, tendrá un total de 61 aerogeneradores, con una capacidad de generación de 500 MW. En total, se estima que, una vez finalizado y a pleno rendimiento -se prevé que entrará en funcionamiento durante la primera mitad de 2023- esta instalación será capaz de generar suficiente energía como para dar servicio a aproximadamente 835.000 personas. De acuerdo con las previsiones de las empresas operadoras, los trabajos de instalación y mantenimiento supondrán la creación de hasta 3.000 puestos de trabajo, de los cuales 1.000 revertirán en España.