La Conferencia de Naciones Unidas sobre Cambio Climático que en estos días se está celebrando en Sharm el Sheij, Egipto, a orillas del Mar Rojo, está recogiendo las opiniones de expertos de todos los países que, en sus diferentes ámbitos, trabajan para acelerar las acciones necesarias para cumplir el doble objetivo definido en la cumbre de París de 2015: limitar el aumento medio de la temperatura global a 2ºC respecto a los niveles preindustriales, recomendando no superar la cota de 1,5ºC (sugerencia ratificada en la COP26 celebrada en Glasgow el pasado año), y conseguir la neutralidad de emisiones en 2050.

En la COP27 ha intervenido el CEO de la compañía multinacional española Amara NZero, Gonzalo Errejón Sainz de la Maza, quien también participó en la COP21 de 2015, y destacó las diferencias entre esta cumbre y la de París. En su opinión, “hay un estado de ánimo diferente. En 2015, en París, todos estábamos preocupados por la situación y se trataba de establecer objetivos que frenaran el cambio climático, pero ahora es muy diferente: la preocupación se ha convertido en alarma y no hay tiempo que perder”.

Diferencias
Resaltó también las grandes diferencias que encuentra en el contexto económico y geopolítico: “Hay que recordar que en 2015 habíamos prácticamente superado la crisis económica de 2008 y había más optimismo. En estos momentos nos enfrentamos a la Covid, recesión económica, inflación, la guerra en Ucrania y una gran crisis energética; por lo que la situación no se parece en nada. Por eso, esta reunión de la COP27 es tan importante”. 

“De hecho, -continuó- el otro día escuché al primer ministro británico, Sunak, decir que a pesar de los serios problemas económicos en los que está sumido su país tenía que estar aquí porque ahora es una emergencia ya que sin una solución climática no va a haber ningún futuro. Palabras que creo que resumen muy bien la situación”.

Y tras reconocer que en estos siete años se han hecho muchas cosas, Errejón pasó a analizar las buenas y las malas noticias que tenemos. Entre las buenas señaló que "el año pasado, en la cumbre de Glasgow, 135 países que representaban el 88% de las emisiones se comprometieron a fijar objetivos para alcanzar el Net Zero. En 2020 las energías renovables supusieron el 12,6% del consumo total de energía a nivel mundial y en 2021 se ha hecho una gran inversión en ellas que ha alcanzado los 366.000 millones de dólares”.

Entre las malas noticias, destacó que “el año pasado ha habido un incremento de las emisiones del 6% y, según parece, en 2022 aumentará incluso un 1% más. Son 2.000 millones de toneladas emitidas, alarmante. En 2020 los subsidios a los combustibles fósiles ascendieron a 5,9 trillones de dólares y hay que tener en cuenta que a día de hoy representan el 80% del consumo total de energía. En cuanto a los 135 países que se comprometieron en Glasgow, sólo 36 de ellos han apostado por un futuro basado 100% en energías renovables. El resto están esperando un respaldo legislativo al respecto”.

Centrándose en el ámbito empresarial, el CEO de Amara NZero puso como ejemplo que “de las 702 compañías incluidas en Forbes 2000 con objetivos Net Zero planteados, dos tercios de las mismas no tienen desarrollado el plan para alcanzarlos”.

Gonzalo Errejón finalizó su intervención planteando lo que, en su opinión, es necesario en estos momentos: “Tenemos ya demasiados objetivos y necesitamos acciones. Hay que actuar, actuar y actuar. Sólo tenemos una oportunidad y es ahora”.