El cargador ofrece hasta 194 kW de potencia, admite integración fotovoltaica y refuerza la seguridad con un sistema de refrigeración líquida y extinción avanzada.
XCharge Europe ha presentado en Berlín, durante la Intercharge Network Conference (ICNC), su nuevo sistema de recarga GridLink, ya implementado en Norteamérica y ahora adaptado a la normativa europea. La solución combina carga ultrarrápida, almacenamiento energético y capacidad de integración con energía solar.
El núcleo del sistema es una batería de fosfato de hierro y litio (LFP) de 215 kWh, escalable hasta 430 kWh, que permite suministrar 194 kW de carga en corriente continua con una entrada reducida de 44 kW de corriente alterna. Esto lo hace especialmente adecuado para ubicaciones con limitaciones de red o donde no son viables grandes inversiones en infraestructura.
Entre sus innovaciones destaca un sistema de gestión térmica con refrigeración líquida, que mantiene estable la temperatura incluso bajo cargas elevadas, y un mecanismo de extinción multicapa que incluye el primer depósito de líquido extintor integrado en un cargador de estas características. Cada módulo de baterías incorpora sensores para la detección temprana de riesgos y ventilación automatizada de gases inflamables.
Además de la seguridad, GridLink ofrece nuevas oportunidades para operadores de infraestructuras solares, al canalizar la generación fotovoltaica directamente hacia la recarga rápida, evitando pérdidas en la devolución de energía a la red. También incorpora una pantalla de 55 pulgadas para interacción con el usuario y contenidos dinámicos.
La compañía subraya que el sistema es compatible con los estándares de comunicación OCPP 1.6J y 2.0.1, y puede conectarse por GSM, LTE o LAN. Su mantenimiento se simplifica al requerir solo dos técnicos para las operaciones de rutina.