Tras la COVID-19, el sector eólico se enfrenta al reto de liderar una recuperación económica sostenible. Para Vestas, se trata de una oportunidad sin precedentes, que está preparada para afrontar junto a sus clientes.
Tras la COVID-19, el sector eólico se enfrenta al reto de liderar una recuperación económica sostenible. Para Vestas, se trata de una oportunidad sin precedentes, que está preparada para afrontar junto a sus clientes.
Sin embargo, el reto no está solo en la recuperación post COVID; no podemos olvidarnos de la lucha contra el cambio climático.
Estamos viendo cómo contar con planes de sostenibilidad cada vez más ambiciosos ya no es un mero complemento, sino un requisito indispensable, tanto de la parte del cliente como de la del proveedor, apoyado, en muchos países, por un marco regulatorio que lo demanda.
“Todo esto está cambiando la visión tradicional que se tenía de los fabricantes como meros proveedores de turbinas eólicas. Ahora, toda nuestra experiencia en el ámbito no solo de la energía eólica, sino de las soluciones de energía sostenible, representa un plus para nuestros clientes”, afirma Borja Vallejo, vicepresidente de Grandes Cuentas y Ventas Estratégicas de Vestas Mediterranean.
Para responder a estos desafíos y acelerar la transición energética, el fabricante eólico Vestas ha fijado un plan de sostenibilidad basado en cuatro pilares: generar cero emisiones de carbono para 2030, fabricar tecnología eólica ‘cero residuos’ para 2040, ser el lugar de trabajo más seguro, inclusivo y socialmente responsable de la industria y liderar la transición hacia un mundo totalmente impulsado por energía renovable a través de la hibridación de la eólica con nuevas energías y tecnologías limpias, como el hidrógeno verde o el almacenamiento energético.
Inversiones Vestas Ventures
Como refuerzo a este plan, el pasado mes de noviembre Vestas lanzó el programa de inversiones Vestas Ventures, por el que invertirá en startups dedicadas al desarrollo de soluciones de energía sostenible en campos como el del almacenamiento, electrificación, hidrógeno verde, reciclabilidad de materiales, reducción de residuos, etc.
"Queremos liderar la transición energética hacia una sociedad más sostenible y ser ejemplo de fiabilidad para nuestros socios en sus metas corporativas respecto a sostenibilidad”, añade Borja Vallejo.
Por delante hay un largo camino por recorrer, pero el sector se muestra optimista. Según GWEC (Consejo Mundial de Energía Eólica, en sus siglas en inglés), se prevé que 355 GW de nueva capacidad eólica puedan instalarse en todo el mundo durante los próximos cinco años, generando millones de empleos.